El coordinador federal participa junto a una amplia delegación de IU en la movilización de este colectivo, desde donde responde a la patronal por negarse a una subida digna del SMI y denuncia que “siempre han estado en contra de mejorar las condiciones de los trabajadores y sí de demoler de hecho el edificio del derecho del trabajo”
“Sus condiciones de precariedad -apostilló- son la contracara de los beneficios multimillonarios de las grandes empresas del IBEX-35, por eso creemos que su iniciativa es muy buena al señalar con el dedo a los responsables y a las grandes empresas que se lucran con la explotación y la precariedad de los trabajadores, una precariedad que les impide desarrollar sus proyectos de vida de forma autónoma e independiente”.
El máximo responsable de IU afirmó con contundencia que “nosotros vamos a seguir mostrando nuestro apoyo a los trabajadores en lucha y nuestra presencia hoy en esta manifestación se debe a este gesto de solidaridad. Queremos que entiendan que en Izquierda Unida tienen un aliado estupendo en esta lucha contra la precariedad”.
Además, razonó que después de que el propio Mariano Rajoy anunciara durante su investidura “no sólo que iban a continuar los recortes, sino que les puso incluso cifra, cerca de 5.000 millones de euros, aunque probablemente sean muchos más”, lo que va a pasar es que “este contexto hace inevitable que la ciudadanía salga a la calle de forma espontánea o de forma organizada. Desde IU vamos a trabajar para que estas movilizaciones sean organizadas y tengan un propósito común”.
El también portavoz parlamentario de Izquierda Unida en el Congreso se mostró convencido de que “el PP va a continuar con su hoja de ruta, va a recortar sobre la mayoría de la población y seguir protegiendo a una minoría que ha aprovechado la situación para enriquecerse”.
Explicó la necesidad de que todas las movilizaciones, independientemente del origen sectorial que tengan, deben “ir convergiendo en una lucha a gran escala para evitar los recortes en el conjunto de los servicios públicos o en el conjunto de los derechos laborales y ciudadanos”.
“Vamos a trabajar -adelantó- para que esta movilización, que se va a dar sí o sí en cualquiera de las circunstancias y en un contexto de recortes, pueda ser exitosa y saldarse con que se pueden evitar estas políticas de recortes que empeoran la vida de la mayoría social”.
Por otra parte, preguntado por la oposición manifestada por el Círculo de Empresarios para apoyar una subida digna del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), manifestó que tanto este grupo empresarial como la CEOE “son reductos que plantean políticas económicas absolutamente antisociales. Siempre han estado en contra de mejorar las condiciones de trabajo y a favor de reducirlas, de demoler de hecho el edificio del derecho del trabajo. Lo último que les falta por pedir son grilletes para los trabajadores para que proporcionen más beneficio a las grandes empresas sin poder tener una vida propia”.
Alberto Garzón indicó sin rodeos que “creo que se equivocan radicalmente en su enfoque. Es evidente que obedecen sólo a sus intereses y no a los del conjunto de la ciudadanía y, mucho menos, de la clase trabajadora”.
Recordó que la subida del SMI supone “una ayuda fundamental para que las familias puedan llegar a fin de mes, pero también para que las pequeñas y medianas empresas puedan seguir incrementando sus ventas, ya que son el tejido empresarial que realmente crea empleo en este país”.
Diferenció entre estas pymes que “se ven beneficiadas por la subida del SMI” y las grandes compañías que “ven un problema en ello” mientras que son “las mismas grandes empresas que durante los últimos tiempos se han dedicado a bajar los salarios y a incrementar la precariedad y la explotación sobre los trabajadores”.
“Nosotros, que pensamos sobre la mayoría social y la clase trabajadora, vamos a ignorar radicalmente los consejos que dan el Círculo de Empresarios y la CEOE, que sólo obedecen a una minoría de la población que es la que se ha enriquecido con la crisis”, apostilló.