“La solidaridad es fundamental, porque somos gente obrera y todo esto tiene un coste económico y personal muy fuerte que no lo podemos soportar a solas”
Mundo Obrero: El día que Alfon entraba a la cárcel quiso hacer un acto reivindicativo, ¿qué le llevo a eso?
Elena Ortega: El motivo es que todo el proceso ha sido una injusticia total pero también la detención fue incluso ilegal, injusta porque el Tribunal Supremo ratifica en junio la sentencia de la audiencia provincial de enero de 2015, e inmediatamente le ponen en busca captura. No le dan la opción a la Audiencia Provincial, como es su función, de avisar por carta o telegrama al condenado para decirle que en una semana o dos se presente en una prisión. Ni siquiera eso, le ponen desde el minuto cero en búsqueda y captura. El estaba viviendo en Cataluña, en pareja, trabajando… y tiene que venirse inmediatamente procurando que no le detengan. Entonces todos sus compañeros de lucha y colectivos que forman parte de la plataforma por su libertad, que se creó cuando su detención en la huelga, decidieron que había que convertir su detención en una acción y que se entregase para que no fuese algo oscuro, a solas y en casa, y poder convertirlo en un acto reivindicativo como había sido toda la lucha por una detención y condena injusta.