IU exige a la Comisión Europea que “pare los pies” al Gobierno de Rajoy ante la próxima reapertura de la central de Garoña

La portavoz de Izquierda Unida en el Parlamento Europeo, Marina Albiol, y la eurodiputada Ángela Vallina advierten de que “la decisión está tomada y hay un dictamen favorable que crea una precedente histórico en el Estado español, porque se avala que una central nuclear pueda operar más allá de los 40 años de vida”
La portavoz de Izquierda Unida en el Parlamento Europeo, Marina Albiol, y la eurodiputada Ángela Vallina han mostrado su total rechazo a la reapertura de la central nuclear de Garoña. Ambas han exigido a la Comisión Europea (CE) que “pare los pies” al Ejecutivo de Mariano Rajoy por “estar poniéndonos a todas y todos en peligro” y que le pida explicaciones por su decisión. En una reunión de la Comisión de Peticiones de la Eurocámara (PETI) solicitaron, además, que se reclame información al Gobierno del PP sobre el estado de seguridad de la planta.
“La situación en Garoña es alarmante porque se ha excedido en varios años los límites la vida útil de la central. La prórroga es una chapuza del Gobierno actual porque no existe un plan energético creíble y sostenible, y es un debate que se lleva aplazando mucho tiempo en nuestro país”, criticó Vallina.
La eurodiputada señaló que el desmantelamiento de la nuclear “no supondría un problema para el abastecimiento energético” del Estado y mostró su oposición a que el Gobierno decida apostar por este tipo de energías, en lugar de las renovables, “como ha dejado claro con su nefasto impuesto al sol”. 
Durante el debate, un representante de la Comisión Europea ha explicado que no se podían guiar por rumores o lo que publican los medios de comunicación en lo que se refiere a Garoña y que por eso debían esperar a conocer la decisión del Gobierno. Vallina, sin embargo, ha cargado con esta forma de actuar de las instituciones europeas y ha insistido en que “las medidas se deben tomar antes de que lleguen los problemas. No podemos actuar cuando esté abierta porque entonces volveremos a reaccionar con efecto retardado”. 
En este sentido, Marina Albiol recordó al representante de la CE que la reapertura de Garoña “es un hecho y no un rumor”, ya que “el pleno del Consejo de Seguridad Nuclear aprobó el pasado 8 de febrero un dictamen para la reapertura de la planta”.
“La decisión está tomada y hay un dictamen favorable que crea una precedente histórico en el Estado español, porque se avala que una central nuclear pueda operar más allá de los 40 años de vida”, ha alertado. Además, “porque ya no se obliga a una revisión integral cada 10 años, sino que ahora es a los 14 años, por lo que estamos hablando de que la próxima revisión de Garoña será en 2031”.
La portavoz de IU ha querido recordar que estas centrales “se construyeron para una vida útil de 25 años, se alargaron después para 40 y ahora hablamos de que operen hasta los 60”. Todo esto, cuando “se ha demostrado que no hay problema de suministro en esa zona porque desde que se cerró Garoña en 2012 no ha habido ningún desabastecimiento”. Por tanto, “no es necesidad, sino poner por delante de nuestra seguridad y del medioambiente el negocio de algunos”.
Albiol acusa al Gobierno del PP de incumplir la directiva de seguridad nuclear, por lo que insiste en que Garoña está emplazada en una zona rodeada por terrenos dentro de la Red Natura 2000. “Lo que pedimos es el cierre y desmantelamiento de Garoña, pero entendemos que PETI no puede hacerlo, así que lo que sí pedimos es que se haga un estudio de todas las centrales nucleares de más de 40 años en Europa para ver en qué condiciones están”.
Albiol ha respaldado que se mantenga abierta la petición y ha solicitado a la Comisión Europea que le pregunte al Gobierno español por qué no le notificó la apertura de Garoña, como parece. Vallina también ha pedido que se siga el caso desde PETI y que se envíe “una carta a las autoridades españolas pidiendo que informen sobre el estado de la seguridad de la central”.