El responsable federal de Políticas Económicas de Izquierda Unida, Carlos Sánchez Mato, tacha de “vergonzoso” que “puedan incluir como ‘medida estrella’ de estas cuentas públicas una insuficiente subida para las pensiones más bajas, además de una mejora para las de viudedad, cuando es algo que estaba comprometido ya en la anterior reforma de las pensiones pero que se habían negado a aplicar hasta ahora”
El responsable federal de Políticas Económicas de Izquierda Unida, Carlos Sánchez Mato, denuncia que el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2018 aprobado ayer por el Consejo de Ministros “supone el exponente más claro de que el proyecto político del Gobierno de Mariano Rajoy está agotado”. Para Sánchez Mato, esta aprobación con meses de retraso de las cuentas públicas para este año “no es más que un ejercicio de marketing y prestidigitación para ocultar la parálisis del Ejecutivo, del Partido Popular y de quienes les sostienen en el Gobierno ante su manifiesta imposibilidad para impulsar y desarrollar las políticas sociales que necesita la mayoría de la ciudadanía”.
El responsable económico federal de IU destaca tras un primer análisis de los datos expuestos en La Moncloa por los ministros de Hacienda y Economía, Cristóbal Montoro y Román Escolano, respectivamente, que estos nuevos PGE “vuelven a ser un lastre para un crecimiento sano y equilibrado de la economía de nuestro país, lo mismo que ha supuesto la política defendida por este Gobierno y los anteriores presupuestos en los últimos años”.
Centrándose, por ejemplo, en temas concretos, Sánchez Mato tacha de “vergonzoso” que el equipo económico de Rajoy “pueda incluir como ‘medida estrella’ de este proyecto de cuentas públicas una subida de hasta el 3% para las pensiones más bajas, además de una mejora menor para las de viudedad, cuando es algo que estaba comprometido ya en la reforma de las pensiones de 2011 pero que se habían negado a aplicar hasta ahora”.
“Han incumplido esto durante siete años -denuncia el dirigente federal de IU- y ahora lo presentan como un logro, cuando es una medida claramente insuficiente y fruto de las justas reivindicaciones que realizan las personas pensionistas en las importantes movilizaciones que llevan a cabo”.
Según los datos publicados por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, el gasto en pensiones contributivas en 2017 fue de 115.729 millones de euros, equivalente al 9,9% del PIB. Sánchez Mato apunta que “esto supone que el esfuerzo que este Gobierno del PP destina al pago de pensiones se redujo por cuarto año consecutivo, tras alcanzar el máximo del 10,6% en 2013”.
“Por muchas excusas que ponga Rajoy para atender como debe a las personas pensionistas, estamos ante nuevos parches y, en general, ante un claro ejemplo de falta de voluntad política que claramente detectan nuestros pensionistas”, apunta.
Carlos Sánchez Mato desmonta alguna más de las “cortinas de humo” que lanzan los responsables económicos del Gobierno para “ocultar el verdadero y nefasto alcance real de estos PGE”. Así, en lo que tiene que ver con el acuerdo alcanzado con los sindicatos para la subida salarial de los empleados públicos -que supondrá incremento del 1,75% en 2018, del 2,25% en 2019 y del 2% en 2020- indica que “en ningún modo puede ocultar el tremendo deterioro causado por el PP al empleo público. El mayor ajuste en toda la recesión en materia presupuestaria recayó sobre los trabajadores públicos”.
En su opinión, “es especialmente detestable que la maquinaria de propaganda de Montoro defienda que este acuerdo sobre los sueldos públicos es algo a glosar cuando se trata de una mínima tirita que se pone tras una enorme sangría”.
El responsable federal de Políticas Económicas de IU alude también al denominado bono juvenil para ilustrar el “trilerismo político y económico” del que vuelve a hacer gala el Gobierno. Detalla que este complemento salarial -430 euros a jóvenes con contrato de formación que cobrarán junto a la remuneración de la empresa- será financiado con fondos de la Unión Europea. Afirma que “con un presupuesto previsto de cerca de 500 millones de euros va a suponer en buena medida una forma de abaratar aún más el coste salarial en el sector privado a costa del dinero público, en este caso proveniente de Europa”.
En este primer análisis de alcance de los PGE para 2018, Sánchez Mato expone que el que se haya incorporado una subida del 1% sobre los del año anterior “demuestra claramente su insuficiencia. El último techo de gasto aprobado en el mes de julio pasado es 62.000 millones inferior al que había en 2010 y menor, incluso, al de 2013, el peor año de la crisis. Lo que se hace con ello es consolidar los recortes de años anteriores e impedir que se atiendan los principales retos de nuestra economía”.
Carlos Sánchez Mato señala también que “cuando este Gobierno y sus leales socios naranjas nos piden que nos fiemos de estos nuevos presupuestos, lo mejor es echar la mirada no muy atrás y ver qué ha pasado, por ejemplo, con los anteriores”. Añade que “la liquidación presupuestaria de 2017 publicada revela que las críticas a las cuentas de ese año estaban más que fundadas. Cualquier parecido de la ejecución con la previsión es pura coincidencia”.
El dirigente de IU insiste en que aunque Montoro diga que han demostrado que ‘la política presupuestaria es la llave maestra para el crecimiento económico, la creación de empleo y el superávit por cuenta corriente’, lo que sí queda demostrado “es la rémora que su política supone para un crecimiento sano y equilibrado”.