IU presenta la campaña ‘La Educación que necesitamos’ y marca sus “líneas rojas” para alcanzar un Pacto de Estado “que no ignore el consenso previo de la comunidad educativa”

Alberto Garzón y los/as miembros de la Permanente del Área Federal de Educación Loles Dolz y José Moreno Arrones parten de la idea fundamental de que “la Educación es un derecho, no un negocio y, por ello, no puede estar sometida a ningún tipo de negociación económica y política que lo condicione”

El coordinador federal de Izquierda Unida, Alberto Garzón, junto a los/as miembros de la Permanente del Área Federal de Educación de esta formación Loles Dolz y José Moreno Arrones han presentado (08/05/2017) el contenido de la ambiciosa campaña ‘La Educación que necesitamos: líneas rojas para un Pacto Educativo de Estado’. IU lanza esta acción política en el marco de las negociaciones abiertas para alcanzar ese Pacto de Estado, que desde hace semanas se desarrollan en el seno de una subcomisión parlamentaria que trabaja en el Congreso.  
Izquierda Unida marca en su argumentario de la campaña un decálogo de ‘líneas rojas’ cuyo cumplimiento considera “irrenunciable” para apoyar ese pacto. Además, como ha expresado Loles Dolz, “ninguna reforma educativa que se pretenda conseguir a través de un pacto puede ser exclusivamente política y no puede hacerse sin contar con el acuerdo ya alcanzado previamente por el conjunto de la comunidad educativa”.
En toda la documentación que desarrolla la campaña, presentada en la rueda de prensa celebrada ayer en la sede federal de IU, aparece destacado el ‘Documento de bases para una nueva Ley de Educación. Acuerdo social y político’ que recoge ese acuerdo previo consensuado y firmado a lo largo de más de dos años por la inmensa mayoría de los colectivos y sindicatos representativos de la comunidad educativa, junto a partidos entre los que se encuentra Izquierda Unida. 
Para Dolz, ese documento es “el fruto del mayor consenso alcanzado desde hace muchos años por los distintos sectores educativos. Sólo por eso la subcomisión del Congreso que trabaja por el pacto debería tenerlo como un referente ineludible en sus trabajos”.
Loles Dolz y José Moreno Arrones destacaron que Izquierda Unida parte de la idea fundamental de que “la Educación es un derecho, no un negocio y, por ello, no puede estar sometida a ningún tipo de negociación económica y política que lo condicione”.
Desde esta base, Moreno Arrones detalló varias de las ideas fundamentales del decálogo de ´líneas rojas’ irrenunciables para IU. La encabeza la necesidad de que “el sistema educativo tenga una única línea de titularidad pública y gestión directa. Los conciertos educativos deben ser eliminados paulatinamente, algo que no se puede conseguir de la noche a la mañana”.
“Debe haber -expuso- una clara participación democrática en la Educación, que incluya la autonomía del profesorado y de los centros educativos”. Moreno Arrones añadió que “la Educación se debe dar en absoluta libertad de conciencia, fuera de todo dogma, pero no sólo los religiosos, con la idea de ‘la religión fuera de la escuela’, sino también sin dogmas económicos. Nos oponemos a que se trate de educar a las personas sólo como mano de obra”.
Las ‘líneas rojas’ de Izquierda Unida se completan con la necesidad de “una financiación suficiente, para que haya así una gratuidad absoluta” que cubra servicios como el transporte, los materiales escolares, las becas o los comedores. Además, esta financiación “debe estar garantizada constitucionalmente, con un suelo de inversión que en IU ciframos en torno al 7% del PIB”.
El dirigente de IU completó su exposición con la exigencia de una “educación inclusiva, alejada del tipo de evaluaciones que planteaba la LOMCE, que sólo buscaban la clasificación y la segregación del alumnado, frente al progreso educativo que se consigue con la evaluación continua”.
No olvidó tampoco que se debe lograr una “adecuada formación del profesorado, con un mismo punto de partida  para tener un cuerpo único”, que es prioritariamente docente y, además, especialista en su campo. Hay que cuidar “esta formación permanente y mejorar el sistema de acceso a la docencia”.
Alberto Garzón destacó, por su parte, “la defensa incondicional que Izquierda Unida hace por una Educación y unos servicios de carácter público, frente a las amenazas políticas conservadoras que priman la privada”. Apuntó que frente a quienes sólo hablan de este tema “en momentos puntuales, cuando se debate un pacto legislativo, hay que hacer una reflexión continua y permanente. De ahí que haya que enfrentar con decisión los problemas que afectan a los servicios públicos” esenciales como éste.
Preguntados por los periodistas sobre si creen que el PSOE mantendrá hasta el final el respaldo dado hace tiempo con su firma  al ‘Documento de bases para una nueva Ley de Educación’ consensuado por la comunidad educativa, tanto Garzón como Dolz no ocultaron su escepticismo. La dirigente de IU explicó que “el PSOE otras veces se ha echado atrás. Espero que ahora no abandone los principios alcanzados por consenso”.
Alberto Garzón recordó las muchas veces en que la dirección socialista falló a sus militantes y votantes haciendo lo contrario de lo proclamado. Apuntó a la intervención la semana pasada del actual portavoz parlamentario del PSOE en el debate del proyecto de los Presupuestos Generales del Estado, cuando dijo que iban a ser ‘implacables’ en la oposición. El coordinador de IU se mostró escéptico de que esto “meta miedo al PP en el Gobierno” y señaló que “aunque las palabras suenan bien, luego retrocede cuando llega el momento de los hechos”.