Garzón y Maíllo llaman a la movilización el 28 de febrero (28-f).

En un acto espectacular en el sevillano Centro Cívico “Sindicalistas Soto, Saborido y Acosta”, antes La Ranilla, los candidatos a Presidentes de la Junta de Andalucía y del Gobierno Central, Antonio Maíllo y Alberto Garzón respectivamente, dieron por comenzada la movilización hacia un 28-F que abarrote las calles de reivindicación y de luchas. Como cada año, pero este con más razón si cabe.



Marina Segura, ex parlamentaria andaluza por Sevilla, se encargó de abrir el acto situando el contexto político en el que se celebraba. Tuvo un emocionado recuerdo para quienes, en estos mismos lugares, antigua cárcel provincial, fueron torturados y represaliados por el fascismo franquista. Este sitio, declarado “Lugar de Memoria” con Izquierda Unida en el gobierno andaluz, acogió el sábado a centenares de militantes entusiasmados dispuestos a dar la batalla para el combate contra la desigualdad. Aquí se puede ver http://youtu.be/V7XBjwtShsM el discurso de Marina.

Por su parte, Alberto Garzón, puso el énfasis en la denuncia hacia la derechización del PSOE, quienes, junto al PP, constituyen el bipartidismo al que Garzón denominó “el partido del orden” por situarse ya, abiertamente, en una deriva conservadora de recortes de libertades y de derechos. “Susana Díaz se ha convertido en vasalla de los poderosos” dijo Garzón en relación con la actitud de la presidenta de la Junta. Llamó a un proceso constituyente refiriéndose a la oportunidad histórica que vive este país. Aquí su intervención, http://youtu.be/018Ztkwepvs que la acabó clamando: “Viva la República. Andaluces, levantaos”.

Cuando tocó el turno a la intervención de Maíllo resonaron los gritos de “Presidente, Presidente”. El candidato a la Junta de Andalucía demostró punto por punto la falsedad de las razones que se han alegado para romper el Pacto por Andalucía y echarnos del gobierno. “Nos echan por rojos y por decentes”, proclamó. Y se remitió a la importancia estratégica de la Asamblea de Balance en la que se decidieron dos cosas: Acelerar el trabajo legislativo, priorizando hacia las leyes que más falta hacen al pueblo andaluz: Renta Básica, Banca Pública, Ley Integral de Agricultura, Banco de Tierras, Ley de lucha contra la Violencia de Género o Suministros Mínimos Vitales, y, en segundo término al proceso de evaluación interno que se haría en junio. Eso produjo miedo en los poderosos y conllevó la ruptura del pacto. Maíllo llamó a congelar la sonrisa que banqueros y grandes empresarios esbozaron cuando IU salió del gobierno. Y que eso suceda el 22 de marzo con la fuerza de la izquierda.

 Aquí su intervención completa: